La delincuencia transnacional representa una amenaza para los territorios y las elecciones generales en el Perú, alertan las autoridades.
La criminalidad transnacional organizada ha crecido considerablemente en diversas zonas de Perú, principalmente en la Amazonía. Según Yorka Gamarra, especialista en conflictividad social, estas bandas cometen delitos como la deforestación, minería ilegal y extracción ilegal de minerales, desplazando a comunidades indígenas que protegen el ambiente.
En una entrevista con Pachamama radio, Gamarra mencionó que la falta de presencia estatal en la Amazonía ha permitido que estas organizaciones criminales controlen vastas áreas, además de realizar actividades lucrativas como trata de personas y narcotráfico. Por su parte, el experto en narcotráfico Jaime Antezana ha alertado sobre la influencia de estos grupos en la política nacional, temiendo que puedan buscar representación en las próximas elecciones.
La corrupción en el Ministerio del Interior y la Policía Nacional, según un informe reciente del INEI, genera dudas sobre la capacidad de las autoridades para combatir eficazmente al crimen organizado. Ante esta situación, es crucial la participación activa de la sociedad civil en todos los aspectos políticos y sociales del país para contrarrestar la amenaza del crimen organizado en Perú.